El fin de semana observé en la entrada de mi casa algo muy hermoso.
Una pareja de golondrinas tijera (hirundo rustica) han decidido hacer un nidito de amor sobre la puerta de la entrada de mi casa.
Se dice que las golondrinas son aves de buena suerte. La golondrinas en el arte y las letras , han tenido muchos simbolismos; casi siempre asociados al paso del tiempo, la fragilidad, el cambio y la renovación.
Estas delicadas aves que se caracterizan por sus flujos migratorios buscando el calor, representan la llegada de la temporada cálida, "una golondrina no hace el verano" dice el dicho, pero percibimos en sus revoloteos que la calidez de la temporada se acerca y con ello, las flores, la fertilidad de los campos. No en vano se ha utilizado para representar la renovación, la vida y el amor. La golondrina, a diferencia de algunas aves, elige una pareja y permanece con ella hasta que muere.
Otra de sus características es que permanece siempre en lo alto, nunca se posa en el suelo, por lo que algunas culturas le atribuyen características de pureza y sublimidad. En China, se cree que dos golondrinas que vuelan juntas simbolizan la felicidad matrimonial.
Para los griegos la golondrina simbolizaba clarividencia, el poder de "ver más allá"
En Egipto, la diosa Isis, -diosa de la maternidad y el nacimiento- se convertía en golondrina para velar el cadáver de Osiris y revoloteaba a su alrededor En Irlanda se cree que para llamar a un gnomo es preciso atar una flor a la pata de una de esas inquietas aves. Una leyenda cristiana dice que una parvada de golondrinas alivió el dolor de Jesús en la cruz arrancando las espinas de su frente por lo que desde ese momento fueron bendecidas y no deben ser comidas, su carne es amarga y no es comestible. También se cuenta que el color oscuro de su dorso proviene del luto y el dolor de la muerte de Jesús y que el blanco de su pecho se manchó de rojo permanentemente por la sangre que brotaba de las espinas..
En la literatura, las hermosas rimas de Bécquer que cantan a las oscuras golondrinas:
"Volerán las oscuras golondrinas
en tu balcón los nidos a colgar
y otra vez con el ala sus cristales
jjugando llamarán"...
Y uno de mis cuentos favoritos de Wilde "El príncipe feliz" donde la golondrina es la perfecta mensajera que reparte la riqueza de aquella estatua que se conmueve del hambre de su gente. Leyendas como la golondrina y la serpiente de la literatura rusa, El conde Lucanor, con sus golondrinas y las semillas de lino, Gilgamesh tras el diluvio envía una golondrina a buscar tierra firme, Tristán encuentra a Isolda con la única pista que contaba; un solo cabello que una golondrina dejó caer.
Para los hombres de mar, tanto los relatos de la mitología, como las características del ave en si misma la golondrina representa "símbolo del regreso a casa" ya que año con año regresa al nido que con su pareja construyó. Por ello, era costumbre entre los navegantes que casa 5000 millas náuticas recorridas se tatuaban una golondrina en el pecho. Un marinero con una dos o más golondrinas tatuadas en el pecho era considerado un marinero experimentado. Era, por así decirlo una especie de curriculum vitae escrito sobre la piel. Se dice también, que en una casa donde habitan las golondrinas, siempre habrá niños y enamorados Se le atribuyen también la creencia de ser portadoras de buenas noticias, visitas de seres queridos, cambios positivos...
Tantas y tantas historias que apenas recuerdo y recapitulo donde estas gentiles aves acompañan la vida de los hombres en su imaginación, individual, colectiva y en su vida cotidiana.
Independientemente de las creencias populares, refranes o augurios, es hermoso recibir unos inquilinos que han elegido nuestra casa para hacer su nido. No se qué mensajes quieran traernos, espero seamos buenos anfitriones y que para todos sea una linda experiencia de hospitalidad, observación y aprendizaje. La naturaleza nos habla en un lenguaje que a veces olvidamos interpretar.
Feliz día del padre a todos los que tienen la dicha de recibir en su hogar, en sus brazos y en su corazón a los hijos, con sus grandes retos y proyectos. Ojalá, como las golondrinas, siempre tengan la alegría de construir junto con su pareja un nido firme y sólido ´para ver crecer a sus polluelos y cuando sea el momento dejarlos volar.
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