Todavía no es navidad. Aún faltan 25 días. Pero los aguinaldos, -que todavía no recibimos-, ya están comprometidos. Con eso de que los comerciantes inventaron el noviembre navideño "compre ahora y páguelo por el resto de su vida" y "ventas nocturnas con el 25% en el monedero electrónico" (osea le vendo caro, haciéndole creer, que le regalo dinero de mentiritas que gastará también en mi tienda). Ocurrióseme asomarme a la venta nocturna de Liverpool insurgentes. ¡No! ¡me sentí en metro pino Suárez en hora pico!
Para empezar, entrando casi en la tienda, una fila si, ¡una fila! -¿Disculpe, para qué es esta fila?- Ahi va la metiche a preguntar...- Es para los celulares- me contesta una señora con cara de que llevaba ya un buen rato esperando formada.
Caminé unos cuantos paso más obligada por el tumulto que me empujaba hacia adentro de la tienda, (cuando yo lo que quería era salirme) y fui arastrada con carriola y todo hasta los elevadores del fondo. 25 minutos frente al elevador y nada. Engentada y malumorada decidí subir por la escalera con todo y todo. En la escalera me topo con un señor en muletas que descendía al tiempo que yo intentaba subir. - ¡Que buenos servicios tiene esta tienda! pensé mientras esquivaba gente para poder salir de ese lugar.
Mientras yo salía veía venir ríos y ríos de gente que se dirigían a la tienda. Pero ¿que necesidad? Deja tu que allí adentro parezca mercado, que las vendedoras ni te pelen, que te estén arrebatando de las manos lo que vas a comprar...
¿Cuál crisis? si los almacenes están llenos de compradores compulsivos u ocasionales, aprovechando las "ofertas"... no parece que el país esté transitando por una de las crisis más fuertes de los últimos años, o quizá este fenómeno es uno de sus efectos, como el borracho del principito:
"-Borracho: tomo para olvidar
- Principito: ¿para olvidar que?
- Borracho: Lo he olvidado"
Asi se olvidan los problemas económicos, comprando. Cómodas mesualidades ¡18 meses sin intereses!
¿sabes que significa eso? que la próxima venta nocturna, la del año que viene, donde igualmente te ofrecerán grandes descuentos y puntos en el monedero electrónico, ¡aún tendrás un saldo pendiente de seís meses de los regalitos del año anterior!
(eso si no sucumbes también a la venta octurna de mayo para las mamás y la de junio para el día del padre, eso, sólo en un almacén, porque cada uno tiene sus promociones...)
No es tan difícil, es cuestión de hacer unos cuantos numeros. El 25% en el monedero electrónico suena muy tentador, pero ¿ayudará en algo para pagar las cuentas de la cuesta de enero? Habría que preguntarle a la escuela de los niños si aceptan puntos para pagar colegiatura...
El tiempo de adviento, que empezó el domigo, es un tiempo de espera, (no de esperar el aguinaldo para correr a gastarlo), es un tiempo de paz, de reflexión, de unión familiar. Es el momento de arreglar cuentas con los que alguna vez dejaste saldos pendientes, para que la navidad, la fiesta en que recordamos que Jesús vino al mundo, se viva en armonía, en amor. Los regalos y los detalles son secundarios. Las verdaderas intenciones de unir a la familia, a los amigos y a los seres queridos, no tiene nada que ver con comilonas hipercalóricas y regalos caros. Aprovecha este tiempo para buscar a los viejos amigos, visitar a los viejos, reconciliarte... Verás que no hay mejor regalo que estar rodeado de quienes amas y te aman en estas fechas.
Enciende esa primera vela, recordando que Jesús vino al mundo por amor a nosotros, vino a encontrarse con los que amaba. ¡no porque esperaba recibir regalos de los pastorcillos!
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