Fin de semana largo, de festejos para los niños y tardes lluviosas.
En el marco del festival del día del niño, encontramos en la cartelera del cine del CCU de la BUAP un filme de animación japonesa, el título original de la cinta es Tonari no Totoro,, en español "mi vecino Totoro"(1988) dirigida por Hayao Miyazaki.
Producida por los Studios Ghibli, este singular personaje "Totoro" desde su creación y hasta nuestros días se ha robado el corazón de chicos y grandes, ganándose incluso un lugar haciendo una aparición tipo cameo en la película de Toy Story 3
para verla las escenas donde aparece este singular duendecillo del bosque da click aquí
Esta linda película de tipo anime retrata la vida rural y cotidiana de la infancia japonesa del los años 50. Un profesor universitario se muda a una vieja casa en el campo con sus dos hijas: Mei de dos años de edad y Satzuki de seis años aproximadamente. La madre de las niñas se encuentra en el hospital, mientras se recupera de una tuberculosis.
El tema de la película es muy sencillo: la inocencia y magia de la infancia hacen viajar a las niñas protagonistas por el mundo de unos seres que nadie puede ver, más que los que tienen ojos de niño. Las motas de hollín que escapan de los rincones para esconderse y no ser vistas, y el vecino misterioso: Totoro, que es un espíritu guardián del bosque.
Las aventuras que suceden en la película son entre oníricas y fantásticas, muy parecidas a lo que un pequeño de entre 3 y 6 años puede relatar como un cuento: escenas que van y vienen de la ficción más alocada; como volar sobre un trompo hasta las copas de los árboles, viajar al corazón del bosque siguiendo a una especie de duendecillo, hacer crecer los árboles a velocidades insospechadas; o presentar la realidad más dura para el par de pequeñas protagonistas; el esperar el regreso de la madre enferma que se prolonga más y más.
Este bello filme de animación es recomendable para niños desde muy pequeños, (2 ó 3 años) quienes se sentirán identificados con Mei y sus travesuras y juegos, acompañarán a los personajes en sus divertidas aventuras a bordo de un gatobús volador dejando atrás el miedo y los problemas y disfrutarán así mismo de un mensaje de amor y respeto por el bosque y la naturaleza.
Disfrutamos mucho este filme, en compañía de mis hijos y mi esposo, quienes no dejaron de soltar carcajadas y risas involuntarias durante la proyección. Quizá por que veíamos en ella las travesuras de las niñas, quizá porque dentro de nosotros hay también un enorme deseo de seguir viendo el mundo con esos ojos de niño; esas mirada que se maravilla con lo más simple; el viento, las copas de los árboles, el brillo de las estrellas, la corriente de un arroyo... Añoramos crear en la imaginación las explicaciones más inverosímiles de los fenómenos que nos rodean como cuando niños..
Feliz día del niño a todos los que aún disfrutamos serlo. Aunque haya días de lluvia que intenten llevarse gota a gota la infancia.
No comments:
Post a Comment