Ríes con la mirada, con los labios y hasta con las manos.
Son de esas expresiones que atraviesan la superficie y llegan directo al corazón.
Tu tienes de esa magia.
Regalas encanto e inocencia a través de tus travesuras,
Necesitas pocas palabras para expresar lo que hay en tu corazón
Y hay mucho en tu corazón. Sobre todo lo que éste mundo necesita.
Hoy abro las puertas de mi casa porque entraste abruptamente en mi corazón, sin llamar a la puerta.
De un día para otro te hiciste presente y me robaste más de una sonrisa, a veces de complicidad y a veces de sorpresa, pero siempre una sonrisa.
Gracias por enseñarme tanto sobre las cosas que valen la pena.
Sobre reír sin motivo alguno, bailar sin que te de pena, demostrar que siempre se puede dar un poco más.
Me emociona enormemente tu visita. Estoy preparando todo para que pases un día lindo aquí, con nosotros. Después de todo no todos los días tiene uno el privilegio de ser visitado por alguien realmente especial. Se que pasaremos una tarde linda y espero sea la primera de muchas mas.
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